La sentencia es un ataque a la democracia: hace falta una respuesta transversal y unánime exigiendo la libertad de los presos y presas políticos

Publicado el Publicado en Comú de Lleida, Notícias y etiquetado , , , .

Acabamos de conocer la sentencia condenatoria de los líderes políticos y sociales independentistas y el Comúdelleida queremos expresar y compartir nuestro posicionamiento sobre esta barbarie, una sentencia que acontece la culminación de un proceso de judicialització de un conflicto que es político.

Lejos de solucionar nada, esta sentencia contribuye a alejarnos del diálogo político, que es donde siempre se tendría que haber situado el conflicto entre Cataluña y el Estado Español, y donde hay que trabajar para encontrar las salidas. Lejos de avanzar hacia una verdadera democracia, esta sentencia es un punto de inflexión y marca un precedente inaceptable, nos aleja en la búsqueda de soluciones de consenso e impide, todavía más, que se puedan tender puentes de diálogo.

Esta sentencia ataca todas las opciones políticas que trabajamos por una sociedad en qué todo el mundo pueda expresarse y en que quepan todos los debates políticos, sin excepción: criminaliza las ideas y a todas las personas que somos demócratas.

Queremos una sociedad en que el debate político sea la herramienta para contraponer argumentos y en que la diversidad de opiniones sea una riqueza que nos haga crecer hacia una democracia verdaderamente llena. Y precisamente, esta sentencia, demuestra lo lejos que estamos de una democracia real y llena.

En el Comúdelleida hay persones independentistas y personas que no lo son, y esta sentencia nos ataca a todas. Nos sentimos interpeladas a mostrar nuestro rechazo contra una sentencia que nos hace dar pasos hacia atrás y nos sitúa, todavía más, en tiempos pasados de persecución política y más represión. Todas nos sentimos atacadas por un sistema judicial que no permite el debate político y que no permite la libertad de manifestación ni la libertad de expresión.

Siempre hemos denunciado la injusticia de unos encarcelamientos que solo se justifican en una sociedad de represión. Ahora no podemos restar inmóviles. Hemos defendido la libertad y la necesidad de que la sociedad se exprese, piense lo que piense, y esta sentencia nos demuestra que no podemos quedarnos quietas, que ante la creciente regresión de derechos hay que seguir defendiendo, de forma decidida y valiente, nuestras libertades, aquellas que siempre hemos defendido, en la calle y en las instituciones.

Hacen falta iniciativas políticas, institucionales y jurídicas que faciliten la salida de prisión de las personas condenadas y el retorno de las personas exiliadas. Hacen falta acciones útiles de respuesta a la sentencia, en la calle y en las instituciones. Hay que trabajar en la posibilidad de explorar todas las medidas que favorezcan que los presos y presas estén cuando antes en casa, y hay que trabajar en la reforma urgente y decidida del Código Penal. Hay que evitar respuestas que nos sitúen donde algunos nos quieren, hay que evitar la violencia.

Hace falta una respuesta transversal y unánime que aglutine todas las personas que somos demócratas, –independentistas y no independentistas– y que defendemos y exigimos la libertad de las personas encarceladas. Estuvimos en el 1 de octubre porque creemos en la democracia. estaremos ahora porque hay que seguir defendiéndola, con más fuerza que nunca.

Formaremos parte de esta necesaria movilización ciudadana, contundente y valiente, que grite muy fuerte que estamos decididos a continuar defendiendo las libertades y denunciando la regresión de derechos. Esto no va solo de independencia, va de democracia.

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